miércoles, 12 de diciembre de 2012

PRINCIPIO Y FIN



A veces me pregunto
si podría alcanzar para estar vivo
con tener solo una duda,
amar a nadie más que a otro par
o escribir un único poema. Incluso acoger
la humildad tibia de una mera respuesta
de entre todas las que me está permitido
aguardar.

Y si eso fuera posible, sabría, en la claridad
de ese franco suceder de las madrugadas,
que principio y fin son la misma cosa
y que en mí confluyen todos los ríos,
y que en mí desaguan, como en un lecho unitario.

Pero hay sobradas preguntas para urdir,
cuerpos dispares a los que poseer,
miles de versos por trazar…
Aunque  en medio de todas las voces
solo un sonido pueda
acompasarse a mi súplica rendida.

Y es su eco, su búsqueda constante,
la estría que forjará el atajo hasta el último hálito,
para ser la única comitiva
cuando entonces no haya luz que divisar
ni queden ya preguntas aplazadas.

© Juana Fuentes




2 comentarios:

  1. Muy profundo ... y el último que apague la luz... para que el próximo la pueda encender.

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  2. ESO...SI NO SE HA FUNDIDO YA LA BOMBILLA.

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